El prof. Abner B. Bartolo H. participó en el Encuentro Iberoamericano de Ciencia y Fe (30 de septiembre al 03 de octubre de 2015), y expuso el tema "Una lectura de los himnos de Amós desde la exégesis y la ciencia". Aquí un resumen de su exposición:

El libro de Amós denuncia vigorosamente las injusticias sociales, el lujo, el culto falso, la satisfacción ilusoria, predice la destrucción próxima del reino; y entreteje estos mensajes con tres himnos. En medio de mensajes de condenación se  reconoce a YHVH como el creador y sustentador de su obra, además se recuerda que si su poder le permite hacer tales cosas ¿cuánto más castigar a los rebeldes?

Los himnos quieren distanciarse de otras cosmologías y declaran que YHVH es el que hizo las constelaciones, da forma a las montañas y crea las nubes (para ello usan tres verbos asociados yatsar, bara’, y ‘asah); es el que hace posible el día a día, que las aguas del mar se conviertan en lluvia; y provoca los terremotos.

Por supuesto, el compositor y sus lectores tenían una comprensión limitada del universo; desconocían las placas tectónicas, cómo suceden la evaporación, condensación y precipitación, no tenían idea de la rotación de la tierra sobre su propio eje ni su movimiento alrededor del sol; sin embargo, en todo esto identificaban la mano de su Dios. Tampoco se les cruzó por la mente que las estrellas que formaban las constelaciones en realidad son soles distantes, y menos que estos albergan planetas o que pudieron originarse en una gran explosión; de lo que sí estaban seguros es que Dios los hizo.

Entonces, ¿cómo conciliar la actual comprensión del universo con el mensaje de Amós? Dos puntos son necesarios: 1) establecer relaciones e identificar contrastes respecto a la cosmología, geología, astrofísica, etc., y 2) rescatar la teología de los himnos. Así pues, si el compositor y sus lectores, en su limitada comprensión del universo, atribuían a Dios el origen y el sustento de todo lo que existe, y le alababan, ¡cuánto más nosotros con nuestro mayor conocimiento!